Ya lo advirtió la Organización Meteorológica Mundial (OMM): el planeta alcanzó niveles muy preocupantes de emisión de gases de efecto invernadero durante 2015 y principios de 2016. Es por eso que de forma continua los gobiernos centrales revisan cada cierto tiempo las normativas vigentes y las deroguen en caso de que las medidas aprobadas hasta el momento no hayan sido suficientes.

El último cambio llevado a cabo para evitar que se debilite la capa de ozono y contribuya al cambio fue el que se realizó en febrero de 2017. El Consejo de Ministros volvió a dar un paso más para aportar su granito de arena y proteger la Tierra aprobando el Real Decreto 115/2017.

A partir de este nuevo reglamento se pretende bajar las emisiones de los gases fluorados de efecto invernadero a la capa de ozono que hay en la atmósfera. Además, el Consejo de Ministros ha querido asegurar la consecución de otros dos importantes objetivos: la certificación de la profesionalidad a la hora de manejar este tipo de gases, así como la correcta instalación de los mismos en aquellos lugares cuya actividad se fundamenta en los gases fluorados.

Lo que debes saber sobre los gases fluorados

Tanto los Hidrofluorocarburos (HFC) como los Perfluorocarburos (PFC), los Clorofluorocarburos (CFC) y el Hexafluoruro de azufre SF6 son gases fluorados que contribuyen en gran medida al deterioro de la capa de ozono. Éste es el motivo por el que en España se ha decidido eliminar, por ejemplo, los equipos eléctricos con SF6 de forma progresiva. En cualquier caso, su reciclado ayuda a reducir las emisiones de carbono, por lo que empresas especializadas en el reciclaje del SF6 realizan un servicio de mejora del medio ambiente.

Asimismo, desde hace unos años los españoles pagan un impuesto sobre estos gases de efecto invernadero a la hora de adquirirlos. Ahora bien, este importe se reduce en caso de entregarse a gestores autorizados para su reciclaje como Sistecoin.